Para hacer realidad una ambición
Porque en la vida uno mismo debe tener metas, sueños y ambiciones y, para muchos corredores, culminar la etapa del running con una maratón es lo más placentero que puede haber. Los 42.195m de los que se compone una maratón dan mucho respeto y por ese motivo es necesaria una buena planificación de entrenamientos y muchas y largas sesiones de running para afrontar una de estas pruebas en las mejores condiciones posibles. Además que no en todas las ciudades se hacen maratones y no todas las maratones son iguales. Si eres ambicioso empezarás con alguna maratón cercana y tal vez continúes con alguna de un país extranjero, teniendo que viajar para ello. Doble placer.
Por una buena causa
Hay cantidad de asociaciones y clubes que aprovechan los maratones para dar apoyo a una buena causa, otorgando un contenido solidario al evento en cuestión. Con una asociación benéfica podrás correr por aquellos que no pueden, destinando lo recaudado por tu organización a proyectos sociales, para cura de enfermedades, o empujando una silla de ruedas de una persona que no pueda correr por sí sola.
Para hacer nuevas amistades
42,195km dan para mucho, tanto que puedes hasta conocer gente nueva por el simple hecho de querer llegar a la misma meta tras conseguir completar todo el recorrido. Otro motivo es el hecho de ir en grupo o de pillar a alguien que lleve un buen ritmo para hacerte de liebre, con la que compartir los kilómetros. En este terreno, no te sentirás distinto porque todos vais a una e intentáis llevar a cabo el mismo propósito. Éstas son las amistades que no se olvidan.
Una experiencia que cambia tu vida
La vida tiene muchos altibajos. Es igual que el estado anímico. A veces nos creemos capaces de lograr algo y otras veces no tanto. El caso de una maratón es lo mismo. Cuando empezamos a entrenar nos sentimos capaces de poder llevarlo a cabo y terminarlo porque quedan muchos entrenamientos por delante pero a medida que se va acercando el día, lo vemos un poco más complicado, sobre todo si no estamos en condiciones y no vemos progresos. Y si mencionamos los distintos días de entrenamiento… pero llegado el día D, nos sentimos capaces de hacerlo –tampoco te vas a echar atrás en la misma línea de salida…-. Terminar una maratón es demostrarse a uno mismo de lo que eres capaz.
Para hacer deporte
Porque éste debería ser el primer elemento motivador para enfrentarte a una carrera. El deporte es vida. El deporte es salud. Numerosos estudios demuestran que con el deporte se consigue acudir menos al médico por enfermedades, es bueno para el corazón y para mantener tu estado de salud en un nivel óptimo y porque, para los que practicamos el running, es nuestra forma de desconectar de la rutina diaria.
¡Porque tú puedes!
Muchos piensan que correr una maratón es ir a por algo que se encuentra fuera de su alcance, más allá de sus posibilidades y que no tiene habilidades para hacerlo. Con entrenamiento, un entrenamiento bien planificado y estructurado, una dieta acorde a las exigencias y, antes de nada, una visita al médico para evaluar tu estado, lo puedes conseguir. Corredores de diferentes edades y tipología, son capaces de terminar una maratón. ¿Tú no serás uno de ellos?