Julio y agosto son los meses de vacaciones por excelencia. Los dos meses que sirven para tomarse un descanso. Dos meses en los que la mayoría de trabajadores aprovechan para su descanso y desconectar de sus obligaciones profesionales. Pero, no todos son capaces de hacerlo. Concretamente y según datos de Bizneo HR, experta en software de recursos humanos, 2 de cada 5 trabajadores tienen dificultades para conseguir desconectar, sobre todo si el tiempo es justo. Sin embargo, el deporte puede ser un gran aliado para conseguir liberarnos del estrés de cada día.
Por culpa de inquietudes laborales, la preocupación por la superación profesional o la toma de decisiones vinculadas al crecimiento, especialización y estabilidad en el trabajo, son aspectos que nos limitan en esa desconexión.
Desconectar, cuestión de salud
Hacer un paréntesis es muy importante, sobre todo si nos fijamos en la salud. Según apunta Bizneo HR, largos periodos de trabajo sin descanso pueden aumentar nuestra ansiedad y estrés hasta un punto peligroso. De hecho, mantener el contacto con el entorno laboral fuera del trabajo altera el descanso y nos mantiene alerta.
El deporte clave para tu salud
Para conseguir desconectar, no hay nada mejor que el deporte. Y correr es una actividad física clave. Porque el deporte te ayuda a reducir el estrés diario, desde un punto de vista psicológico y desde un punto de vista fisiológico.
Psicológicamente, nos permite distraernos y concentrarnos en otras cuestiones. Fisiológicamente, con el deporte se liberan endorfinas por parte del cerebro, la hipófisis, etcétera. Algo que nos aporta una mayor sensación de bienestar, disminución de las sensaciones de dolor y mayor «felicidad». Además de que el cansancio favorece el descanso.
Lo malo de las vacaciones es que, por culpa del cambio en la rutina, muchos abandonan la actividad física durante el periodo vacacional. El calor, moverse a otro lugar, la dificultad de encontrar un lugar de entrenamiento en el lugar de vacaciones, etcétera son algunos de los argumentos más comunes. Pero mantener el deporte es posible si sabemos cómo:
- Corre a primera hora de la mañana o a última de la noche.
- Aprovecha la piscina para practicar la natación y mantenerte fresco mientras practicas deporte.
- Hidrátate bien: beber es importante antes, durante y después de la actividad. Y con este calor, toma alguna bebida isotónica para compensar la pérdida de electrolitos.
- El running es una de las disciplinas más «socorridas». No entiende de lugares. Ya sea en la montaña como en playa, siempre puedes correr.
- Ropa adecuada y transpirable. Evita las desagradables rozaduras y las ampollas untándote de vaselina.
- Échate crema protectora para evitar las consecuencias de una exposición continua al sol.
- Cambia la gorra por una visera, evitarás que tu cabeza suba de temperatura más de lo normal.
