En un ejercicio muscular, se diferencian dos fases del movimiento: el concéntrico (cuando el músculo se acorta) y el excéntrico (cuando el músculo se alarga). Otra opción es el ejercicio estático, el llamado “isométrico”, pero hoy no nos centraremos en él.
Para prevenir lesiones es bueno añadir este tipo de ejercicios a tu rutina de entrenamientos, ya que fortalece la musculatura sin someterla a alta tensión.
Es esta fase llamada excéntrica la que suele producir mejores beneficios de fuerza y con COMPEX se puede entrenar de manera específica. Aunque el músculo está en contracción, a la vez se está estirando y esto obliga tanto a los tendones como a la unión entre en músculo y el tendón a fortalecerse. Es un entrenamiento agresivo que daña un poco la estructura del músculo, pero es la puerta de entrada para una mejora ideal.
Entre todas sus posibilidades, es muy efectiva para reforzar el tendón de Aquiles y prevenir futuras lesiones en la zona. Pero también se puede usar en otros grupos musculares, tanto de los miembros inferiores como de los superiores (ver vídeo).
La corriente mantendrá en contracción al músculo durante unos cinco segundos, pero voluntariamente podemos estirarlo y sumar los beneficios que tiene la electroestimulación a los del ejercicio excéntrico.
Para este fin, cualquiera de los programas de fuerza nos puede servir: Fuerza 1, Fuerza 2, Fuerza 3, pero es necesario empezar con suavidad y saber que durante los dos días siguientes no deberíamos trabajar el mismo grupo muscular o corremos el riesgo de lesionarnos.