¿A quién no le gusta un buen masaje de descarga después de un ejercicio intenso?
Como es lógico, hay muchas maneras de dar un masaje y ésta es la razón principal por la que los efectos pueden ser difíciles de homogeneizar. Algunos fisioterapeutas prefieren apretar más mientras otros se quedan en un masaje más superficial. Unos mueven las manos de manera más rápida y enérgica cuando otros amasan mucho más los músculos. ¿Cuál es, entonces, el mejor masaje? La respuesta es prácticamente imposible y se puede concluir que “para gustos, colores”.
Pero analizando un poco los efectos que debería tener un masaje de descarga se pueden destacar varios:
· El retorno venoso: una de las consecuencias habituales del ejercicio físico es la pesadez que queda en las piernas debido al acúmulo de sangre y sustancias de desecho. Aunque no todos los estudios aseguran que el masaje pueda ayudar a la eliminación de sustancias de desecho, sí es verdad que el efecto de drenaje ayuda al retorno de la sangre acumulada en las piernas.
· La reparación de microrroturas: en este punto todavía es más difícil hablar con certeza absoluta pero la teoría afirma que el masaje puede aumentar la circulación sanguínea en un músculo y este fenómeno, por su parte, mejorar la reparación del tejido. Por este motivo, y con la condición de que el masaje no sea lo bastante intenso como para aumentar el daño previo, se puede suponer que un masaje de descarga favorecerá la recuperación de los microtraumatismos.
· La reducción de la stiffness: stiffness significa rigidez, pero la palabra española es demasiado intensa para definir el proceso de agujetas o similar presente en el músculo sobre todo después de un ejercicio intenso. Esta stiffness se puede mejorar con el masaje de descarga (en parte por el habitual aumento de la circulación sanguínea, pero también por el continuo amasamiento del músculo que aumenta las propiedades viscoelásticas del músculo).
· La recuperación inmunológica: algunos estudios han llegado a la conclusión de que un masaje de descarga inmediatamente después del ejercicio intenso favorece la recuperación de nuestro sistema inmune (el de las defensas). Por desgracia, este beneficio no está confirmado por todos los estudios y, además, el masaje está contraindicado en personas que padezcan fiebre.
En general, los efectos del masaje son difíciles de cuantificar y están muy condicionados por aspectos subjetivos: habilidad del terapeuta, entorno donde se realiza el masaje, duración del mismo e incluso estímulos externos como la temperatura, la luz y la música que acompañan a la sesión. Por esta razón, los beneficios del masaje son casi exclusivos de cada persona y mi consejo es que utilices el masaje de descarga de manera habitual, pero buscando quién es el mejor fisioterapeuta para ti.
Como normal general, utiliza el masaje de descarga después de las sesiones intensas de entrenamiento y, en especial, antes y después de las competiciones. Antes para dejar la musculatura a punto y después para. Pero permite que pasen al menos unas horas justo después del esfuerzo o el masaje puede ser dañino (si, como es habitual, recibes un masaje al finalizar una carrera, que éste sea suave y superficial).