No pretendo meterme en charcos que no me corresponden ni vengo aquí a hablar de influencers. Pero sí a hablar de quienes prescriben consejos sobre actividad física y “vida saludable” solo por tener un poco de labia y unos cuantos miles de seguidores. Cuidado. Gracias a -o mejor dicho, por culpa de- las redes sociales asistimos a la ‘edad de oro’ de los gurús, de quienes predican sabiduría sobre un campo (ya sea el entrenamiento, la nutrición, etc) sin tener la más mínima formación académica ni titulación.
Recientemente conocíamos una noticia sobre la nueva moda de correr maratones sin entrenar. Dos de los artífices de este absurdo son los gemelos Wade, con más de 750.000 seguidores en TikTok. En sus vídeos, con millones de reproducciones, se les puede ver corriendo el Maratón de Londres alegremente y llegando a la meta en tres horas y media mientras aseguran que “es perfectamente posible correr un maratón sin entrenar, ya lo véis”.
Otro influencer, Robert Rausch, decidió correr un maratón dando vueltas a una pista de atletismo. Y grabarse, claro. Su video, sobreactuado, ya suma más de tres millones de visitas y medio millón de likes. Son varios los ejemplos que circulan en la red en los últimos meses con influencers corriendo maratones sin -teóricamente- preparación previa. Y el mensaje de todos ellos convergen en un mismo discurso: el de la determinación, el de la superación, que no hay barreras, que cada persona puede ser lo que quiera ser, y que si de verdad no deseas multiplicar tus ingresos por 3 trabajando cómodamente en casa siendo tu propio jefe.
Disparates sin ningún rigor científico y con el único aval de sus miles de seguidores y likes. Bandera roja, como dicen ahora los chavales.
El escaparate irreal de las redes sociales
Pero no son solo un puñado de gañanes americanos quienes lanzan mensajes abominables como este. En España y en muchos países del mundo influencers con físicos que se ajustan a los cánones del momento se permiten adoctrinar a sus seguidores con consejos y lecciones sin ningún fundamento. Dictámenes gratuitos que calan con facilidad en la audiencia, y que pueden ser muy peligrosos para los más jóvenes o personas en situaciones vulnerables.
Hay que llevar cuidado. Asistimos a un mundo irreal en ese escaparate que son las redes sociales donde nada es lo que parece. Pero por suerte también encontramos muchos influencers que difunden conocimientos y aprendizaje desde su formación y experiencia. Entrenadores titulados, nutricionistas o fisioterapeutas que educan sobre hábitos de vida y hablan desde la prudencia de dirigirse a un público muy amplio y heterogéneo.
Porque siempre, para cualquier objetivo que tengamos, desde bajar de peso hasta terminar un maratón en menos de 3 horas o simplemente correr por salud para evitar lesiones, la mejor solución es recurrir individualmente a un profesional, una persona cualificada que nos paute un plan específico diseñado para nuestro propósito. Cuidado con los cryptobros del running.