Todos sabemos que para llegar bien a una carrera y no sufrir más de lo necesario, es necesario realizar un correcto entrenamiento. Pero solo con entrenar no es suficiente. El entrenamiento activo se debe complementar con un buen entrenamiento invisible: tus hábitos y estilo de vida.
Llevar un estilo de vida saludable, una alimentación sana y equilibrada o un buen descanso son algunas de las cosas que conforman este entrenamiento y que influyen directamente en el rendimiento físico:
– DESCANSO:
Es importante dormir. Lo ideal, ya sabéis, 8 horas. Durante el sueño el cuerpo realiza la síntesis de proteínas (repara todo el tejido contractil que se ha roto con las diferentes actividades del día y por el entrenamiento propiamente dicho). No descansar lo suficiente no sólo producirá cambios negativos en tu estado de ánimo sino que también agregará cierta fatiga que será contraproducente a la hora de entrenar.
Antes de ir a descansar, evita bebidas con cafeína, realizar cenas copiosas, procura apagar cualquier artefacto electrónico y trata de generar el hábito de acostarte siempre en un mismo horario.
– ALIMENTACIÓN SALUDABLE Y EQUILIBRADA:
Para tener un metabolismo rápido y en óptimas condiciones es recomendable comer entre lapsos de 3 horas máximo. Saltarse comidas no sólo ralentiza tu metabolismo sino que te hará comer de más y esta ingesta será guardada como depósito de grasa siendo no adecuada su absorción.
Grasas saludables, hidratos de carbono y proteínas no deben faltar nunca. Sobre todo los carbohidratos, fuente principal a utilizar cuando corres.
No tienes que llegar a sentir hambre para comer. Esto es un alerta de que tu organismo ya se encuentra vacío. Lo mismo ocurre con la hidratacion: si tenemos en cuenta que perdemos mucho líquido, sales y minerales cuando entrenamos, beber entre dos y tres litros de agua diarios (en diferentes dosis) sería lo ideal.
– HÁBITOS SALUDABLES:
Evita situaciones de estrés, conflictos, ambientes nocivos que no ayuden a tu estilo de vida deportivo. Lo ideal es rodearse de gente que realice actividad física; asçi te alejatrás de tentaciones. Es muy positivo también realizar actividades recreativas que no tengan que ver con correr como practicar yoga, meditación y compartir tiempo con los amigos y la familia.
CORRER no debe ser el centro de tu vida