Hay deportistas que marcan una época. Ya sea por sus logros, su personalidad o su carisma, algunos atletas trascienden las fronteras de su disciplina y dejan una huella en la memoria colectiva. Es el caso de Usain Bolt, el ser humano más rápido del mundo, el hombre que elevó la velocidad a un nivel nunca antes visto y llevó la bandera de Jamaica a todos los rincones del planeta con su zancada amplia, su ritmo relampagueante y su estilo desfachatado.
En una entrevista cedida a «Inside Track – World Athletics», el ex velocista de 36 años habla de sus inicios en el mundo del deporte y de las dificultades que atravesó al convertirse en atleta profesional. También reveló anécdotas del día que consiguió el récord del mundo en los 100 metros y dio pistas de sus planes para el futuro.
«Cuando crecí en Jamaica todo era deporte. Mi papá era un fanático del deporte entonces estaba muy metido desde niño», cuenta el ex atleta, que comenzó jugando al críquet y luego fue arquero de fútbol. «Jugábamos en la calle, usábamos cualquier cosa, como naranjas para jugar fútbol. Cualquier cosa con tal de hacer algo».
Su entrenador de críquet notó que tenía una habilidad especial para correr, entonces le propuso que se metiera en atletismo. «Yo era fast bowler en críquet y un día [el entrenador] me preguntó si había probado con correr. Dije no. Y me dijo ¿sabes qué?, deberías probar porque siento que serás muy bueno en eso».
El joven Bolt comenzó a correr e inmediatamente supo que tenía un talento especial. En 2002, con 15 años de edad, ganó el Campeonato del Mundo junior en 200m, siendo el ganador más joven de la historia en ese evento. A los 17 años se convirtió en atleta profesional, pero la transición fue muy difícil debido a una serie de lesiones que lo afectaron durante 2 años.
«Fue duro. Estaba triste todo el tiempo porque había sido muy bueno como juvenil y la transición para ser profesional no estaba siendo sencilla», confiesa Bolt. «Me tomó 3 o 4 años para realmente llegar al punto que quería. Y eso fue por causa de las lesiones y mucha gente que decía que estaba acabado, que era un fracasado, que no lo iba a lograr como profesional. Eso me puso triste por momentos. Pero conocer a Glen Mills fue un placer y me hizo enfocarme y volver a las pistas».
En 2007 llegó como favorito al evento de 200m del Campeonato del Mundo de Osaka, pero quedó segundo por detrás de norteamericano Tyson Gay. Entonces su entrenador le recomendó pasarse a la distancia de 400m, pero él se negó.
«Yo no quería hacer los 400m, entonces le dije hagamos un trato. Déjame correr los 100 metros y si hago una buena marca correré los 100m y si hago un mal tiempo pasaré a los 400m», recuerda el astro jamaiquino. «Encontramos un mitin en Grecia donde corrí en 10.03. Cuando hice esa marca todos estaban corriendo alrededor de 9.8, entonces 10.03 no estaba mal. Gané la apuesta y así fue como empecé a correr 100m.»
El 31 de mayo de 2008, Bolt estableció un nuevo récord del mundo de 100m en Nueva York con una marca de 9.72 segundos. Ese mismo año, en los Juegos Olímpicos, ganó 3 medallas de oro en 100m, 200m y 4x100m. Una nueva era comenzaba.
«En Pekín fue cuando las personas comenzaron a mirarme. Para mí fue un momento genial. Fue mi primera medalla olímpica. Nunca había ganado una medalla, entonces para mí fue algo grande. Estaba emocionado de estar en los Juegos Olímpicos ganando y haciéndolo bien. Fue hermoso.»
Un año más tarde, Usain Bolt participó en el Campeonato del Mundo de Atletismo de Berlín, donde alcanzó la cúspide de su rendimiento deportivo. En la final de 100m estableció el récord del mundo con una sorprendente marca de 9.58 segundos.
«Recuerdo que hicimos una apuesta con mi entrenador y mi masajista sobre cuán rápido iba a correr. Yo sabía que iba a romper el récord del mundo, porque estaba en muy buena forma y había corrido tan bien durante toda la temporada. Mi apuesta fue 9.54, la de mi entrenador 9.52 y mi masajista dijo 9.56. Él estuvo más cerca, así que se llevó el dinero».
Unos días después, volvió a demostrar que era el mejor velocista de todos los tiempos en la final de 200m con un nuevo récord del mundo: 19.20 segundos.
«Cuando se trata de los 100m mi entrenador es siempre muy estructurado. Tienes que hacer esto, planear aquello… pero cuando se trata de los 200m solo dice haz lo tuyo», bromea el ex velocista. «Los 200m son como mi hijo único. No sé como explicarlo pero los 200m es algo que siempre he hecho. Me tomó un tiempo perfeccionarlo, porque la esquina requiere mucha técnica. Puse mucho trabajo en eso».
Los récord mundiales de 100m y 200m establecidos por Usain Bolt en el Mundial de Berlín 2009 continúan vigentes y ningún atleta se ha acercado de forma significativa a sus marcas.
«Creo que el récord de 100m va a ser más difícil de batir, porque es más rápido y si cometes un error durante la carrera no lo consigues. Es mucho más técnico y por eso pienso que va a durar más», explica el plusmarquista, que también ostenta el récord del mundo en el relevo 4x100m.
Usain Bolt se retiró del atletismo profesional en 2017 con 11 títulos mundiales y 8 oros olímpicos en 100m, 200m y 4x100m.
«Mi objetivo principal fue siempre dominar a través de los años y es lo que hice. Cada año, cada temporada, estaba a punto, trabajaba duro y estaba dominando, entonces para mí fue perfecto», admite. «Ahora estoy enfocado en mis hijos. Están creciendo y lo disfruto, es divertido. Las personas me preguntaban si quería ser entrenador y siempre decía que no tengo paciencia para entrenar. Pero ahora que tengo hijos tengo que tener paciencia y me estoy inclinando a convertirme en entrenador algún día», concluye.